los invernaderos

"He vuelto a mi ciudad, conocida
hasta llorar,
hasta las venas y los ganglios hinchados
de la infancia..."

Mandelstam 

crujes el vientre del jarrón sin importarte las flores

así escribo mis versos, 

así escribo mis restos, 

dices,

con venas enlodadas, besos de sarcasmo,

hilos de dolor y puños apretados 

aunque quede todo seco

qué maravilla construir algo de nuestras ruinas

llevarnos la sangre y los nombres

repetir la escena en el laboratorio

como si la primera vez

como si un amanecer

cuando ya éramos comida para perros 

como un caballo viejo que nadie piensa en ver correr

tráeme los paraguas mojados

libros antiguos repletos de páginas marcadas

fotos viejas que detengan el aire

como un cuadro de Hopper

tráeme una brisa de mar

un frescor de iglesia

y las almohadas que albergan tus orgasmos

haz invernadero de tus brazos

 y haz buhardilla con tus labios

 apuntalemos la esperanza

 aunque en mi cabeza un coro de muertos

 invente plegarias 
  

invéntame soles de salón

haz refugio del sofá

y aliméntate con mis versos

aliméntame con tus restos.