sábado, 18 de agosto de 2012

el arte de la rabia




vamos a deshidratarnos. vamos a sudar el odio, la poesía, el espanto y el pasado. los aullidos a la luna y la espera. la habitación será un charco. deberás hacer torniquete con tu lengua o al día siguiente dirán: qué hermosos, murieron sedientos y ahogados. haré ovillos con tus orgasmos y me haré jerséis de lana para pasar el enero que llegue cada vez que te vayas. voy a descerrajar contra tu pecho uno a uno mis deseos con un lo siento falso, muy falso. el amor como un horno. el arte de la rabia en tus manos. necesito la resaca de tu piel y de los días en que andas perdido, así como mi lengua sobre tu asfalto. quiero caer sobre ti, que reviente el vidrio por lo nunca gritado. quiero ser tu vértigo y tu vuelo y la caricia que te derriba. que te derriba en cada noche que se alarga demasiado. que te derriba en el segundo en que la habitación se vuelve negra y la saliva espesa te anda devorando. esta anemia tiene que ser lo mucho que me faltas y esta carencia de luz a pleno día el significado de distancia. siempre aguardaré tu siguiente asalto. siempre así hasta que me queme la garganta con tu cayena. esta mujer tiene que ser motel para tu descanso y tú mi géiser y mi condena.

2 comentarios:

  1. besos, Miss D
    tu eco arrebata lo que queda

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  2. No dejar que una sola gota se evapore o se malgaste en los desiertos de nuestro propio cuerpo. Que esa lengua sea torniquete u oasis, o la apertura a una gruta subterránea donde las aguas no dejen nunca de fluir....Bello texto. Un abrazo..

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