Raymond Chandler - Joan Margarit
Cada uno es una novela negra.
El dolor es el crimen y, amar a una mujer,
el detective duro y honrado del relato.
Dormirse fatigado, oyendo a alguien que llora,
necesitar dinero, quedarse sin trabajo,
es la comisaría donde nos interrogan
tan sólo acerca de la soledad.
Y nadie es inocente: tras la puerta
de los ojos se juega hasta la madrugada.
Un amor fracasado es volver a un barrio pobre
y dormir solo en un hotel por horas.
Los recuerdos son huellas digitales
en el lugar del crimen, pruebas falsas,
montajes de corruptos policías.
Somos calles ocultas por la niebla,
escenarios de un thriller.
Hola,
ResponderEliminarQuería decirte que he encontrado tu poema muy especial;cuenta con unas metáforas muy genuinas.
Me ha gustado mucho la transmisión de emociones.
Gracias.
Saludos.
Sete.
Amiga,
ResponderEliminarUn buen poema que nos arrastra a las profundidades oscuras de la vida con una imagen colosal y un ritmo intrépido-. Mé gustó mucho, voy a publicitarla. Bss, Ann@
PD Te pase mi última publi por si quieres dejar unas palabras. Gracias
http://annagenoves2012.blogspot.com.es/2012/11/trasparente.html