catorce años de ventana abierta e incendio descontrolado
5114 días sacando a pasear al huracán propio bien desatado
sin despegarme de la tinta maremoto
un 7-eleven en mi pulso
haciendo torniquete al bajón en pleno tornado
invitando al picnic de la intrascendente, pero propia, devastación
soplando con mi aliento vertical cuando se me llenan los ojos de marea
surfeando el melodrama y derramando adrenalina en petit comité
versos o lencería del alma
muchos aviones y muchas botellas de vino
he escrito mucho, he leído más
he amado y me he sentido amada todos y cada uno de esos días
he reído como si el mundo fuera a explotar en un cuarto de hora
y he llorado algún ratito
bien inundada de música
disparando a cada atardecer con mis ojos
y mi árbol de jade aún tiembla en la terraza
y sigo traduciendo el corazón cual Malinche
intensita y críptica sin remedio
mi corazón es una licorería
y vosotros
sois el tsunami que me abraza incandescentemente
y me siento dichosa, hambrienta, curiosa, histérica, tierna y muy bizarra
8 febrero 2022
8 febrero 2008
mis desastres naturales
que aquí se sufrió un incendio
te dirán mi olor a humo y las cenizas de mis intentos.
que pasó un vendaval
y me dejó desnuda y algo aturdida
en mitad de esta mala ciudad
que ni es lo suficientemente grande como para perderme
ni lo suficientemente pequeña como para encontrarme.
que llego de un invierno frío
que acabó con las huertas igual que acabó con mi esperanza.
que sufrí un pequeño terremoto
ignorado por la escala de Richter pero que echó mis cimientos por los suelos.
que subió la marea
y en lugar de ahogar mis penas disfruté de un cruel naufragio.
pero a pesar, muy a pesar de éstos,
mis pequeños desastres naturales,
se dice que la tierra es sabia
y que aunque no olvida,
es capaz de rehacerse
aunque sólo sea...
para volverse a deshacer
te dirán mi olor a humo y las cenizas de mis intentos.
que pasó un vendaval
y me dejó desnuda y algo aturdida
en mitad de esta mala ciudad
que ni es lo suficientemente grande como para perderme
ni lo suficientemente pequeña como para encontrarme.
que llego de un invierno frío
que acabó con las huertas igual que acabó con mi esperanza.
que sufrí un pequeño terremoto
ignorado por la escala de Richter pero que echó mis cimientos por los suelos.
que subió la marea
y en lugar de ahogar mis penas disfruté de un cruel naufragio.
pero a pesar, muy a pesar de éstos,
mis pequeños desastres naturales,
se dice que la tierra es sabia
y que aunque no olvida,
es capaz de rehacerse
aunque sólo sea...
para volverse a deshacer
Gracias por enseñarme qué hacen con el tiempo los Poetas
ResponderEliminarBrindo por 1906 períodos más de 7-eleven en tu pulso, con todos sus (tus) desastres desbocados como caballos dementes
Recostado en el temblor de ese árbol de Jade, te celebro y celebro
ResponderEliminarcada uno de tus días/arterias a borbotones de vida carnaval y poesía. Fuerte abrazo, Malinche.
Como me alegro que los días con sus noches hayan sido complices de tu voz (la imagino a lo Patti Smith) escrita. Que ninguna estantería de ninguna librería, biblioteca arda de tus versos es absurdo. Yo seguiré curioseando en tus desastres venideros.
ResponderEliminarDecirte también gracias