Bendita
maldita, deja de hurgar en la basura. Qué atajos buscas que no encuentras. Con
tu lengua en mi boca me siento saciado. Conoces el atributo esencial del que te
respira: capacidad torácica de coloso. Cuánto desierto has tragado. Cuánto impulso
acumulado para el salto. Inspira. No expires, jamás. Ya que somos manirrotos
del tiempo sin esquinas, ya que demostramos habilidad para el malgaste del
cuerpo, que no del alma, que sabes que de místico no tengo nada cuando el frío
me busca para abdicar en tu calma. Contamíname con las playas que inventas en
tu cabeza, que de orillas tórridas te hago en los silos que me arden por dentro
por pura desesperanza. Tu piel emana sus caricias con arcadas de espanto. Allí
donde la noche alberga la zorra que aguarda tu sueño, fabrica tu insomnio con
clavos y grietas, haz refugio, mi pordiosera. Deja que entre en ti y te deshaga
la pleura del ansia, que te velo incansable y te cubro con mi agalla. Renacimiento,
grito. Cólera, mi hembra infinita y enfervorizada. Consúmete en cada bocanada
para ser el humo que me apuñale en cada puerto. Nudos, lazos y perdidas batallas se agolpan en
mi garganta. Me estás pensando. Manoseas el momento entre tus piernas en esta
arritmia de domingo abortado. Domingo estrecho de luces apagadas. Domingo de
pretérito llanto con el que condimentar la tarde eterna. Abandona tu ajuar de
errores y gangrena y haz de mis sarmientos asideros salvajes que te abracen.
Sentado en una cuneta mirando lo que leo, sorprendiendo al hombre que navaja en mano te abre la piel, Miss...y lo perdonas.
ResponderEliminarme sacaste de estos suelos, llenaste de turbia luz jadeada en las cicatrices el blues ronco del asfalto devolviendo fuego a la sed y vino a la crueldad que saluda atracada en la noche
ResponderEliminarBenditas malditas todas, con todos y cada uno de sus rincones.
ResponderEliminarBenditos malditos todos los domingos.
Un abrazo.
Brutal, como debe ser.
ResponderEliminarManosear entre las piernas para endulzar lo amargo de la tarde dominguera... tan espesa... Un abrazo.
ResponderEliminarSiempre salvaje y desgarradora. Bendita maldita Julia ;)
ResponderEliminarrenacimientos, sarmientos y tus enardecimientos-
ResponderEliminarabrazo Miss.
"Contamíname con las playas que inventas en tu cabeza"
ResponderEliminarJoder. Ahí he quedado prendado.
julia, esta frase es una locura: Cuánto desierto has tragado.
ResponderEliminarrepito a esther: bendita maldita julia
sos una maravilla
besos inmensos
Increíble, brutal.
ResponderEliminarUn saludo