Con todo el amor
y con toda la devastación
llegan las mujeres
que se visten de puerto y se dejan las uñas largas
y el pelo largo
y el amor bien largo
y el ronroneo infinito
Vengo a arder
vengo a formar parte del derrumbe
no busco asiento
se cedió la moldura del corazón
siempre fue un triángulo amorfo
un edificio que se asienta
y fresias en el recinto de la luz
2018 puede ser el año en que muramos
sin haber visto dragones jugando en la sala
ni escafandras de cristal en el perchero
ni vino que sepa a yugular hinchada
Yo me alimento del plancton de las horas bajas
como campos que verdean en el fondo de mis ojos
Yo hago abanico de los rastrojos antes de que llegue el
viento
con sus rabias
Yo pinto con colores
pero escribo con tizón
abro las ventanas y tengo todos los azules
y tomillos y romeros en la terraza
pero cuando estoy sola me alumbro con la carne de dentro
y es lo que hay
y es lo que tengo
Yo a tes soñaba con pintar de color el mundo.
ResponderEliminarAhora a veces sueño con sólo desaparecer de él.
Bonita entrada .
Me gustó.
FELIZ 2018 QUE SEA EL AÑO
ResponderEliminar"Las mujeres que se visten de puerto" <3
ResponderEliminarBonito texto y bonita imagen :)
Como lloran los niños del último banco... Mira que son bonitos algunos versos. Y las fresias. Y la luz violentada del amanecer.
ResponderEliminarAbrazos.
Una preciosidad de principio a fin...pero ese final es mayúsculo,alumbrarse con la carne de dentro...
ResponderEliminarNos vemos, un abrazo...
joder joder esto da dolor de garganta
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